La Audiencia Provincial juzga este miércoles a un hombre, acusado de falsificar cinco billetes de 20 euros e intentar pagar con ellos varias consumiciones. Los hechos sucedieron el 8 de agosto del 2017 en Castellón, donde abonó lo que estaba tomando en un bar con uno de esos billetes ilícitos. Al día siguiente, repitió la conducta y el fiscal mantiene que los billetes falsos se reprodujeron con una tecnología llamada de chorro de tinta y que se imprimieron en un papel que es distinto del legítimo.

Así lo argumenta en su escrito de acusación provisional, solicitando una pena de siete años de prisión por un delito continuado de expedición de moneda falsa y otro delito leve continuado de estafa, según consta en la calificación del Ministerio Público. La vista comenzará a las 10.00 horas en la Sección Primera con su interrogatorio.