Uno de los dos detenidos como presuntos autores de la agresión sexual y la detención ilegal a una menor de 17 años en Burriana el día de Nochevieja --en prisión provisional desde la madrugada del sábado por orden judicial-- continúa sin identificación oficial, a la espera de que sus huellas dactilares confirmen su identidad. Todo apunta, según ha podido saber Mediterráneo, a que los dos arrestados, que tienen 19 y 21 años y son de origen rumano, pueden ser parientes, ya que comparten apellido, según la filiación aportada por ellos.

Sin embargo, uno de los jóvenes está indocumentado, por lo que los investigadores realizan los trámites pertinentes a nivel europeo para cotejar su nombre y verificarlo lo antes posible.

Este periódico ha podido conocer que uno de ellos no tiene antecedentes penales. El otro, a falta de la confirmación de su identidad, tampoco contaría con ellos.

‘PISOS PATERA’

Ambos habrían llegado hasta Burriana junto a otros familiares para trabajar como temporeros en la naranja, según las hipótesis de la investigación. Agentes de la Guardia Civil registraron las casas en las que pernoctaban, tratándose de pisos patera en los que residían una gran cantidad de personas, hacinadas en cada habitación y en condiciones de falta de salubridad.

Los hechos, como avanzó este diario, sucedieron alrededor de las 5.00 horas del 1 de enero. La víctima estaba disfrutando de la noche de Fin de Año en la carpa municipal de Burriana y, sobre esa hora, abandonó la fiesta hacia su vivienda sin compañía, como en tantas otras ocasiones cuando había salido de fiesta.

Fue en ese trayecto hacia su domicilio cuando se vio sorprendida por dos personas «con acento rumano», que la abordaron, le taparon la cabeza y se la llevaron en coche hasta un inmueble. Según la versión de la joven, los supuestos agresores la retuvieron y decidieron liberarla a media mañana, cuando ella pidió ayuda a una persona conocida para llegar hasta su casa. Tras ello, contó lo sucedido a sus familiares, antes de ser atendida en el Hospital la Plana de Vila-real.

La Benemérita inició una investigación y, con la ayuda de los datos aportados por la adolescente, pudo llegar hasta los presuntos autores y proceder a su detención, esclareciendo con suma rapidez un caso que generó una gran alarma social en Burriana.

Cientos de personas salieron a las calles, indignadas con la presunta agresión sufrida por la adolescente y se concentraron frente al cuartel de la Guardia Civil. Tras una declaración maratoniana de los detenidos, el Juzgado nº5 de Vila-real decretó su ingreso en prisión preventiva.