La Policía Nacional ha liberado en Alicante a dos mujeres víctimas de explotación sexual, una de las cuales fue obligada a abortar hasta en cinco ocasiones, y ha detenido a cuatro personas que formaban parte de una organización criminal dedicada a la trata de seres humanos.

Las víctimas, procedentes de Nigeria, se encontraban en una situación de total vulnerabilidad al desconocer el idioma y carecer de documentación y dinero, y habían contraído una deuda con sus captores de 35.000 euros, según la Policía. La ruta utilizada por los integrantes de la red para trasladar a las mujeres captadas hasta el continente europeo era «extremadamente dura, en condiciones de seguridad e higiene muy precarias», y varias de ellas llegaron a fallecer durante el trayecto mientras que otras eran asesinadas cuando se resistían a mantener relaciones sexuales con sus captores.

Fruto del operativo policial, fueron detenidos cuatro miembros del entramado criminal en España, y su líder se encuentra en prisión provisional. La organización contaba con diferentes células de actuación especializadas en la captación de las víctimas.