Cuatro hombres españoles de 23 a 51 años han sido enviados a prisión sin fianza por, presuntamente, formar un grupo criminal dedicado a la venta de heroína y cocaína que tuvo a tres personas encerradas por separado en un zulo de 10 metros cuadrados durante hasta tres semanas, en condiciones infrahumanas.

Según la Guardia Civil, esta organización obligaba a otras personas a trabajar para ellos como vendedores de los estupefacientes y, para ello, les mantenía encerrados en el zulo durante días, siempre de uno en uno. A estos hombres, arrestados en Crevillent, se les atribuyen los supuestos delitos de homicidio en grado de tentativa, detención ilegal, amenazas, lesiones, robo con violencia, tenencia ilícita de armas, tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal.

Los detenidos utilizaban a las otras personas para la venta con la intención de no ser relacionados directamente con la actividad ilícita.

Su centro de operaciones estaba montado en una casa de Crevillent, cuya entrada permanecería siempre abierta, y en su interior construyeron un zulo, de 10 metros cuadrados, asegurado con bloques de hormigón y una reja metálica de acero de gran densidad, que sería utilizada como ventanilla de venta de droga.