La policía ha desmantelado una banda itinerante de ladrones de casas, que tenía su base en Valencia y a la que se le atribuyen al menos 12 robos en domicilios de Madrid, Pontevedra, Asturias, Guipúzcoa y Navarra y que exhibía en las redes sociales la alegría por sus golpes e, incluso, el botín.

Según informó ayer la Dirección General de la Policía, la operación se ha saldado de momento con cinco detenidos de origen albanés, miembros de un grupo especializado en el robo de viviendas con moradores en su interior, que no dudaban en emplear la violencia si eran sorprendidos.

El grupo se dividía en dos células, con base en Valencia, que operaban en el norte y en Madrid.

Con los beneficios obtenidos se financiaban sus gastos en prostitución, drogas y alcohol.

Además, los arrestados compartían en las redes sociales grabaciones con el producto de los robos, en las que aparecen celebrando los golpes, brindando, bailando o arrojando el dinero en efectivo al aire.

Muy activa y con gran movilidad geográfica, la banda perpetró la práctica totalidad de sus robos en viviendas unifamiliares y con sus habitantes dentro.

Las primeras pesquisas llevaron a la localización en Valencia de un ciudadano albanés que colaboraba con diferentes grupos criminales integrados por compatriotas que acudían a España para realizar robos con fuerza.

Gracias a los dispositivos de vigilancia, los agentes pudieron al fin identificar y localizar al resto de los miembros del grupo y los vehículos que utilizaban en sus desplazamientos, con lo que llegaron a protagonizar escenas de conducción temeraria. H