Una mujer de 67 años, de nacionalidad francesa, murió tras precipitarse a una cala de rocas de Dénia (Alicante) desde una altura de unos cuatro metros después de perder el equilibrio cuando intentaba coger una flor. Los testigos señalaron que la víctima, que al parecer residía en un municipio cercano, caminaba acompañada por su marido y, en un momento dado, trató de coger una flor situada el borde, pero perdió el equilibrio y cayó sobre las rocas y falleció prácticamente en el acto.