La Policía Nacional desarticuló una organización dedicada a la regularización de inmigrantes, que pedían un permiso de residencia por arraigo, a los que cobraba hasta 3.000 euros, y detuvo a 29 personas en cinco ciudades españolas (10 en Alicante, 11 en Pamplona, cinco en Zaragoza, dos en Álava y una en Girona).

La investigación se inició en Alicante hace unos tres meses, tras constatar que ciudadanos árabes obtenían la tarjeta de residencia de manera fraudulenta y detectar que el pasaporte que constaba en el certificado de empadronamiento había sido expedido en fechas posteriores a la que constaba como alta en el padrón.