Una embarcación de la Guardia Civil de Castellón y buzos de la demarcación de Alicante realizaron varias inmersiones para tratar de averiguar qué objeto hay sumergido frente a la playa de la Concha. Finalmente, descubrieron que se trataba de un cañón. El aviso lo dio en la tarde del miércoles uno de los bañistas, residente en Orpesa, que habitualmente frecuenta la zona y que en el momento del hallazgo se encontraba junto a sus dos hijos. Los trabajos de los buzos consistieron en destapar el objeto de hierro, de más de un metro de longitud.