La Audiencia Provincial de Toledo ha condenado a 13 años de prisión a una mujer de 41 años que asesinó, tras asestarle 59 puñaladas, al padre de su expareja, con quien mantenía una relación sentimental.

La jueza ha dictado la sentencia tras el acuerdo de conformidad entre la acusación, la defensa, el Ministerio Fiscal y el abogado del Estado.

Según la sentencia, se declara probado que, en el 2014, la acusada mantenía una relación sentimental con el fallecido, al que conocía por ser el padre de su expareja, con la que tuvo un hijo y con quien cesó el vínculo «años antes». En la madrugada del 3 de mayo, la acusada cogió dos cuchillos y le asestó hasta 59 puñaladas, que le causaron la muerte. Después llamó a Emergencias para comunicar que «había sido violada y en su defensa había ocasionado la muerte de su agresor».