Un activo manifestante de Castellón, Víctor Tormo, de 46 años, ha sido condenado a 100 euros de multa en sentencia ratificada por el magistrado de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón, Horacio Badenes, por llamar el pasado 11 de septiembre, durante unas protestas estudiantiles en la capital de la Plana, “perros del Estado”, “mercenarios”, “secretas idiotas” y “borregos” a varios agentes del Cuerpo Nacional de Policía.
El suceso se produjo al día siguiente de los altercados en la UJI durante las protestas por los recortes, donde algunos participantes entraron al párking e intentaron acceder a la azotea. También lanzaron huevos al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que inauguraba el Espaitec 2.
El acusado de una falta contra el orden público interpuso un recurso contra la sentencia dictada en su día por el juez del juzgado de Instrucción número 1 de Castellón, Rafael Marí, ya que alegó que los hechos no eran ciertos.
Para el magistrado de la Audiencia ha quedado probado, tras la declaración de los agentes víctimas de los insultos y de un testigo presencial, que el manifestante Víctor Tormo realizó fotografías con su teléfono móvil a los policías de incógnito. Que los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado le pidieron que no les realizara fotos porque eran agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones. El acusado les solicitó entonces que se identificaran y los policías le facilitaron sus números de placa.
En el juicio de faltas intervinieron dos testigos. Uno de ellos explicó en la sala que el acusado se acercó a los policías para hacerles fotos y que estaba solo.
El otro testimonio fue el de la diputada autonómica por Esquerra Unida, Marina Albiol, quien indicó al juez que ella acompañó en todo momento al acusado y que este no vertió ningún insulto.
Para el magistrado, esta declaración se contradice con la efectuada por el primer testigo por lo que no le da credibilidad. H
