Un vecino de Vinaròs, de 39 años, ha sido detenido por conducir de forma temeraria y hacerlo, además, teniendo el carnet retirado por sentencia firme. Además, este individuo presentaba evidentes síntomas de estar bajo la influencia de bebidas alcohólicas y se negó a someterse a las pruebas de alcohol y drogas, mostrándose violento con los agentes y llegando a empujar a uno de los policías locales intervinientes, según fuentes cercanas al caso.

Los hechos sucedieron el viernes por la noche, sobre las 22.00 horas. Un vecino contactó con la Policía Local y alertó de que un conductor circulaba de forma temeraria por una zona comercial llena de terrazas de la calle Socorro, incidiendo en que había estado a punto de arrollar a unos clientes y que se había dado a la fuga. Al cabo de unos minutos, recibieron cinco o seis llamadas más, avisando a los agentes de que un grupo de personas tenía al conductor retenido y requiriendo presencia policial.

Los agentes se trasladaron hasta allí, comprobando una sintomatología más que evidente de que iba bajo la influencia de sustancias. Al pedirle que se sometiera a las pruebas de detección, el varón se negó --hecho que constituye ya de por sí delito--.

La actitud del implicado fue en todo momento, según las mismas fuentes, altiva y violenta, llegando incluso a empujar a uno de los policías locales, por lo que se le imputa, asimismo, un presunto delito de desobediencia grave.

El vinarocense tenía varios antecedentes por hechos similares por haber conducido ebrio y una resolución judicial que le impedía ponerse al volante hasta el próximo año 2020.

Ante todos estos hechos, el conductor, que puede enfrentarse hasta a cinco delitos, fue engrilletado y trasladado hasta las dependencias policiales, pasando a disposición judicial el sábado por la mañana. Por su parte, el automóvil quedó retirado y fue puesto a disposición judicial.