El conductor de un turismo que circulaba en sentido contrario por la M-30 de Madrid provocó la madrugada del sábado al domingo un grave accidente al embestir a otros cuatro vehículos. Ocho personas resultaron heridas fruto del múltiple siniestro.

Pese a la violencia de la colisión, el kamikaze, de 52 años, solo resultó policontusionado y fue trasladado al Hospital Clínico con pronóstico menos grave. En total, el detenido condujo en sentido contrario durante 19 kilómetros.

Los bomberos tuvieron que rescatar a dos heridos que habían quedado atrapados dentro de los vehículos.