El presunto degollador chino de Benicàssim, A.Z., se encuentra ingresado en el Hospital Provincial de Castellón, según ha podido saber Mediterráneo de fuentes fidedignas. Concretamente, en la Unidad de Psiquiatría del centro, donde los especialistas están realizando una evaluación en profundidad al supuesto asesino por sus problemas mentales.

Aunque el juez del Juzgado de Instrucción 2 de Castellón decretó para él prisión comunicada y sin fianza por haber degollado, presuntamente, a uno de sus clientes en la terraza del bar La Alegría de Benicàssim el pasado día 8; el magistrado pidió también que recibiera tratamiento psiquiátrico. Según informan a este diario fuentes judiciales, en los próximos días emitirán un informe hospitalario sobre A.Z., aconsejando si debe ingresar en la cárcel o en un psiquiátrico.

LA TESIS

Y es que todas las hipótesis apuntan a que el presunto asesino sufrió un brote psicótico y asestó cuatro puñaladas a la víctima, sin intercambiar palabra alguna, mientras el fallecido se encontraba tomando un café y leyendo la prensa en el local.

En caso de ser condenado, sus supuestos desequilibrios podrían, incluso, rebajarle la pena de prisión a la mitad, como ya explicó este periódico. La causa se mantiene abierta por un delito de asesinato, que está castigado con penas de 20 a 25 años de cárcel. Sin embargo, si el tribunal aprecie una atenuante muy cualificada de alteración mental, la condena podría quedarse en el rango de los 10 a 20 años.

La mujer del fallecido, que concedió una entrevista en exclusiva a este diario, aseguró que el presunto degollador y su marido «no tenían relación de ningún tipo». La familia de la víctima lamenta la muerte de un hombre «bueno, tranquilo y responsable» por estar, según dicen, «en el lugar y momento equivocado».

Después de cometer el brutal crimen, A.Z. fue detenido por la Guardia Civil y guardó silencio durante las 48 horas que pasó retenido en las dependencias policiales. Tras pasar a disposición judicial, dos médicos forenses del Instituto de Medicina Legal de Castellón lo evaluaron por espacio de cuatro horas.

Sus conclusiones fueron tan claras que el magistrado no dudó en pedir que el presunto asesino recibiera tratamiento psiquiátrico durante su internamiento en prisión. Una decisión que podría sufrir modificaciones en las próximas horas en función del informe médico del Provincial.