La Unió de Llauradors i Ramaders denunció ayer que más de 200 almendros fueron destrozados “de forma salvaje” el pasado fin de semana en diferentes parcelas de la localidad de Vall d’Alba.

El importe de las pérdidas ocasionadas por este suceso podría cuantificarse en más de 6.000 euros, dado que en los terrenos había árboles de tres o cuatro años que estaban a punto de dar cosecha la próxima campaña y algunos, incluso, tenían almendras. Según la asociación, se han presentado cinco denuncias en el cuartel de la Guardia Civil de Vilafamés en lo que va de año. Al parecer, los afectados no tienen ninguna relación entre ellos y la rotura de la vegetación se ha realizado de forma indiscriminada.

La Unió alerta que todos los robos de plantones de almendro se solían producir debido a la falta de existencias en los viveros por los buenos precios que había registrado este fruto durante los últimos años, pero “los hechos acaecidos en Vall d’Alba parecen obedecer a una actuación salvaje y brutal sin un motivo claro ni aparente”, denunció la entidad a través de un comunicado.

De esta forma, la organización reclama que se extreme la vigilancia en la zona para evitar nuevos actos vandálicos durante el verano y demanda una mayor agilidad en la investigación para esclarecer estos hechos. H