Las 10 familias que fueron desalojadas del número 89 de la calle Boqueres de Almassora el pasado lunes por el incendio en el que murió una mujer pudieron volver ayer a sus casas, según confirmaron fuentes municipales. Los servicios técnicos del Ayuntamiento acudieron a revisar la estructura del edificio y comprobaron que estaba correctamente, por tanto, cuando la Policía Judicial retiró el precinto, los vecinos regresaron a sus viviendas. Ahora investigan las causas del fuego que calcinó parte del tercer piso del inmueble, falleciendo en el mismo una mujer que vivía allí sola y su perro.
