Sin rastro de él desde el pasado jueves, L.R., el joven polaco de unos 30 años supuestamente desaparecido en Fuentes de Ayódar, regresó a su casa ayer sano y salvo, aunque notablemente desorientado. Sin previo aviso y sin responder al móvil durante todos estos días, el vecino del municipio hizo acto de presencia ayer por sorpresa en su casa, junto al coche que le había prestado un amigo para, en teoría, acudir a su puesto de trabajo. Fue este conocido quien presentó la denuncia el sábado.