Dentro de los servicios establecidos para prevenir el tráfico y cultivo de sustancias estupefacientes en la provincia de Castellón y erradicar los puntos de compra-venta de droga, la Guardia Civil ha desmantelado uno de ellos en Benicarló.
Las investigaciones se iniciaron cuando los agentes encargados del operativo detectaron que numerosas personas de localidades limítrofes, relacionadas con infracciones de tenencia ilícita de droga, acudían con
asiduidad a un domicilio situado en la zona de la partida Río.
Los guardias civiles pudieron averiguar que tres personas de un clan familiar estaban utilizando su vivienda como punto de venta de droga. Los agentes, tras solicitar el correspondiente mandamiento judicial, accedieron a la vivienda, la cual tenía grandes medidas de seguridad, encontrando en su interior 190 envases con metadona líquida, 20 gramos de marihuana, una báscula de precisión, 37.800 euros en efectivo, una lámpara para detectar billetes falsos, dos datafonos, libretas con anotaciones de deudas de compradores, un puñal de grandes dimensiones y una carabina del calibre 5,5.
Por todo ello se procedió a la detención de dos varones y una mujer como supuestos autores de un delito de tráfico de drogas. Continuando con las pesquisas los guardias civiles les pudieron implicar en otro delito el de defraudación de fluido eléctrico, ya que carecían de contador y estaban conectados al suministro general de luz pública. Las diligencias instruidas han sido entregadas en los Juzgados de
Instrucción número 3 de Vinaròs.
Fruto de dicha operación queda desarticulado un punto de venta de droga en la provincia que creaba una gran alarma social. Estas operaciones se suman a las constantes investigaciones realizadas por la Guardia Civil para combatir los eslabones de los delitos contra la salud pública.
