La expareja de un ciudadano colombiano asesinado a primeras horas de ayer en la localidad oscense de Broto fue detenida unas pocas horas después de que se encontrara el cuerpo, según informaron fuentes de la investigación.

El fallecido, de 25 años, regentaba el bar-restaurante Vallés de la localidad altoaragonesa, un establecimiento del que se hizo cargo en el momento en el que se jubilaron los anteriores dueños y en el que también trabajan sus padres, explicaron distintas personas que conocían a la víctima y a sus progenitores.

La Guardia Civil investiga la muerte de este hombre, quien llegó a esa población pirenaica hace cinco años y se hizo cargo del establecimiento junto a su pareja, también de origen colombiano, aunque en la actualidad llevaba el local en solitario, puesto que ambos habían roto la relación desde hacía un año aproximadamente, y cuyos motivos podrían estar relacionados con el suceso que tuvo lugar ayer sábado.

SIGNOS DE VIOLENCIA / El hallazgo del cuerpo, con visibles signos de haber sido apuñalado, se produjo ayer por la mañana, después de que el padre de la víctima acudiera al domicilio. Rápidamente relacionaron el suceso con la desaparición de la exnovia, por lo que de inmediato los agentes iniciaron su búsqueda, siendo detenida horas más tarde como presunta autora de los hechos.