Detenido por presunta corrupción el jefe de la oficina de extranjería de Castelló. El máximo responsable de la sede ubicada en la plaza Teodoro Izquierdo, de unos 60 años, ha sido arrestado por la Policía Nacional por supuestos delitos de cohecho en el marco de una operación con más detenidos, externos a la oficina, según ha podido averiguar este diario.

La investigación del funcionario de cuerpos generales, con una larga trayectoria en la capital de la plana y quien ha llegado a ejercer también como delegado sindical, se ha llevado con bastante secretismo por parte de Asuntos Internos. Al parecer, agentes de Madrid se han trasladado a Castelló para el seguimiento del caso.

Tras numerosas sospechas e indagaciones, su detención se hizo efectiva el pasado miércoles, pero no fue hasta ayer cuando el jefe de extranjería pasó a disposición judicial. Lo hizo en el Juzgado de Instrucción 1 de Castelló, que lo dejó en libertad con cargos tras comparecer ante el juez. La investigación pretende esclarecer si el funcionario público, en ejercicio de su cargo, solicitó o aceptó una retribución económica o regalo para realizar u omitir un acto dentro de su competencia.

TRÁMITES

La oficina de extranjería de la capital tramita, entre otras cosas, las tarjetas de residencia, una vez obtenida la pertinente resolución de la Subdelegación del Gobierno. También llevan a cabo certificados comunitarios, prórrogas de estancia por estudios, investigación o formación o desplazamientos temporales de menores extranjeros, como consta en la página web de la institución.

Las citas para los diferentes trámites de tarjetas de residencia (temporal, familiar, de larga duración etc.) siempre han tenido una elevada demanda y largos tiempos de espera. En la capital de la Plana eran habituales largas colas frente a la oficina y denuncias de falta de personal por parte de los funcionarios. En el actual contexto de pandemia, con una reducción muy significativa de los trámites presenciales --casi detenida por completo durante el Estado de Alarma--la situación no ha hecho más que empeorar y lograr una cita es cada vez más complicado. Tanto es así que comenzaron a aflorar en internet los anuncios en los que se vendían citas.

Por ejemplo, en Wallapop, se registraron anuncios velados para este fin. La falta de recursos de las oficinas de todo el país hizo casi imposible conseguir número para obtener o renovar permisos de residencia para inmigrantes durante los peores meses de la pandemia, por lo que los turnos se revendían por 100 o 200 euros.

Ante estos hechos, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones reaccionó e impulsó una serie de acciones para proteger la seguridad jurídica de las personas extranjeras. Desde el pasado diciembre, través de un recordatorio que figura en las resoluciones que expiden las oficinas de extranjería, se subraya que la mera tenencia de dicha resolución produce plenos efectos frente a la administración y frente a terceros, y su eficacia no se encuentra condicionada a la obtención de la tarjeta de identificación de extranjero (TIE).

La investigación deberá determinar si el jefe de la oficina de Castelló se lucró a cambio de agilizar trámites a inmigrantes.