La periodista de El Correo de Burgos-El Mundo Yolanda Pascual Expósito fue asesinada ayer de madrugada a manos de su expareja, Ignacio G.G., de 62 años. La víctima tenía una hija de 17 años. La mujer sufría violencia psicológica de su exmarido y autor confeso del crimen. Ambos habían tenido una separación traumática y esta semana acudían al juzgado porque su hija había solicitado renunciar a las visitas paternas, según el director del diario donde trabajaba la víctima.

Según los datos facilitados por la policía, la mujer llegó con su vehículo la noche del miércoles al garaje de su vivienda. El agresor estaba esperándola con un cuchillo y le asestó varias puñaladas. Los vecinos, alertados por los gritos, avisaron a la policía.

El director de El Correo de Burgos-El Mundo, Ricardo García Ureta, declaró que sus compañeros del periódico no se explican cómo ha podido terminar así una situación de «violencia psicológica». La propia víctima les había hablado de esa situación de «violencia psicológica», que la había llevado a separarse de su esposo hace cuatro años, manifestó el director del periódico a los periodistas tras participar en un acto de condena por este crimen machista convocado por el Ayuntamiento de Burgos.

Según explicó García Ureta, “ella nunca denunció maltrato porque no era ese maltrato físico tan visible”. El periodista comentó que cada vez que llegaba a la redacción una noticia de violencia de género, Yolanda decía que cualquier día le pasaría a ella. H