Un hombre de 27 años, con orden de detención e ingreso en prisión, fue detenido por la Policía Nacional en el puerto de Gandia cuando iba a embarcar en un ferry con destino a Ibiza portando 1,8 kilos de hachís.

Los agentes que le interceptaron encontraron seis placas de hachís ocultas en sus zapatos y debajo de los pantalones y otras 12 en el interior del coche que conducía. El detenido, de nacionalidad española, tiene en vigor una orden de detención e ingreso en prisión por conducir bajo los efectos de alcohol o drogas.

Los agentes fueron requeridos por la sala del 091 para que se dirigiesen al puerto de Gandia, al recibir el aviso de que en el ferry con destino a Ibiza iba a embarcar una persona que tenía en vigor una orden de detención. Tras localizar al sospechoso, que quería viajar con su coche, los agentes le dieron el alto, y en el cacheo posterior le encontraron seis placas de hachís: cuatro en el interior de sus zapatos, a modo de plantilla, dos en cada uno, y otras dos debajo de los pantalones, a modo de cinturón, con un peso de más de medio kilo.

Mas tarde, los agentes y el arrestado se dirigieron al depósito para realizar un registro del automóvil en el que hallaron otras 12 placas de hachís, cuatro de ellas ocultas en la zona de los pedales del conductor y detrás del tapizado, y las otras ocho en el techo, entre el tapizado y la chapa. Pesaban más de un kilo.