La Guardia Civil ha detenido por un presunto delito de homicidio por imprudencia al conductor del coche implicado el pasado lunes en la colisión con una motocicleta en la nacional 340, en el término municipal de Almassora. El motorista, de 54 años y vecino de Burriana, perdió la vida en el accidente de tráfico, que se produjo a las 4.30 de la madrugada.

Según ha podido saber Mediterráneo, los investigadores --pertenecientes al equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil-- sospechan que el arrestado, vecino de Vila-real y también de 54 años, realizó un giro antirreglamentario en el kilómetro 971 de la carretera.

Esta supuesta infracción del turismo, que circulaba en sentido Barcelona, habría causando, al parecer, la colisión frontolateral del coche del investigado --un Opel Vectra-- contra la moto, que iba en sentido Valencia.

Tras recibir el aviso del siniestro, el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) movilizó una unidad del SAMU, cuyo equipo médico realizó la reanimación cardiopulmonar avanzada y otras maniobras de estabilización. Los efectivos sanitarios lograron recuperar las constantes vitales del motorista.

Posteriormente, el hombre fue trasladado en ambulancia al Hospital General Universitario de Castelló por politraumatismos. Finalmente, perdió la vida en el centro castellonense al no poder superar las graves lesiones.

CONDENA RECIENTE / Este periódico publicó el martes la condena, precisamente, por un delito de homicidio por imprudencia. Un joven fue sentenciado a dos años de prisión por invadir el carril contrario, dar positivo en alcoholemia --0,75 g en sangre-- y causar la muerte a una chica de 29 años en la CV-17, en el puente de Benadresa de Castelló. Hacía dos meses que tenía el carnet de conducir, venía de celebrar su 19 cumpleaños en Onda y llevaba 19 horas y media sin dormir.

La hija de fallecida, de ocho años, también resultó herida de gravedad en el siniestro vial.

El Juzgado de lo Penal número 4 analizó el caso e ordenó indemnizaciones que suman 566.000 euros para los padres, hermanos, hijos y la pareja de la fallecida.

Otros dos años de cárcel impuso la Audiencia el pasado año a otro conductor por el atropello mortal de un peatón en la plaza María Agustina de Castelló. Entonces, el condenado --con antecedentes por conducción sin permiso y por circular ebrio-- se dio a la fuga sin auxiliarlo.