Los dos alumnos de la Universidad Politécnica de València que hackearon el sistema informático del centro para subirse la nota irán finalmente a juicio, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

Se trata de dos estudiantes del doble grado de Administración de Empresas e Ingeniería en Tecnologías y Servicios de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), que se enfrentan a una posible condena de 3 años de prisión.

Si bien todavía no se ha señalado una fecha concreta para el juicio, el Juzgado de Instrucción número 14 ha dictado recientemente la apertura de juicio oral y ha dado traslado del asunto a los juzgados de Lo Penal.

La Fiscalía Provincial de Valencia, en un escrito de acusación al que ha tenido acceso EFE, les considera responsables de un delito continuado de falsedad en documento oficial y otro, también continuado, de descubrimiento y revelación de secretos, y les reclama sendas multas de 3.600 y 3.000 euros.

Los acusados, según la acusación que ejerce el Ministerio Público, accedieron de forma ilícita a la red informática de la universidad en varias ocasiones entre el 2 de abril de 2017 y el 31 de enero de 2018 tras apoderarse de los nombres de usuario y de las claves mediante un sistema 'keylogger' -que memoriza las pulsaciones que se realizan en un teclado- instalado en los ordenadores que utilizaban los profesores dentro de las aulas.

Los accesos al sistema se realizaron desde las mismas conexiones inalámbricas de la universidad a través de los ordenadores portátiles de los alumnos, que usaron la red TOR (El Ruter Cebolla, por sus siglas en inglés) que oculta las direcciones IP de los usuarios y supuestamente mantiene el secreto de los contenidos que se mueven a través de ella.

El primero de los acusados, al que se reclama una multa mayor, mejoró sus notas de seis asignaturas en diez accesos, mientras que el segundo utilizó estos accesos ilegales en dos ocasiones para mejorar sus notas de dos asignaturas.

El fiscal reclama que se forme una pieza separada para que se averigüe la capacidad económica de los acusados, a efectos de establecer sus responsabilidades.

Los dos se acogieron a su derecho a no declarar cuando fueron llamados por el juzgado en calidad de investigados durante la fase de instrucción.

Como acusación particular, la UPV ha reclamado unas condenas similares a las que solicita el Ministerio Público, aunque no ha informado en detalle sobre su petición concreta.

La dirección de la Universidad Politécnica de Valencia abrió un expediente administrativo a los procesados por falta "muy grave", que concluyó con una propuesta de sanción -de la cual no se ha informado- y que fue remitido al juzgado instructor.

En la tramitación de este expediente la UPV aplicó como medida cautelar la suspensión de la condición de alumno a ambos procesados, si bien esta medida cautelar se levantó en cuanto se inició la instrucción de la causa penal y el juez rechazó la petición de los servicios jurídicos de la universidad para que se ordenase de nuevo dicha suspensión.

De hecho, podría darse la paradoja, según sostienen los servicios jurídicos de la UPV, que estos alumnos fuesen declarados culpables en un juicio y que no fuesen expulsados, ya que no se podría sancionar en vía administrativa lo que ya se sanciona en vía penal; y por el contrario, podría suceder que fuesen absueltos y, sin embargo, expulsados del centro en virtud del expediente administrativo que les considera responsables de una falta "muy grave".