Un ciudadano marroquí, de 41 años, ha sido condenado a dos años y medio de prisión por asaltar y desvalijar una vivienda de Orpesa. Se trata de la casa de su exvecino, a la que accedió a través de la terraza para robarle todos sus objetos de valor.

Entre el botín sustraído, una televisión, un deuvedeé, un vídeo VHS, un descodificador de antena parabólica, un home cinema, un proyector de televisión y una pantalla, un mando de luces, unos prismáticos, un radiador de aceite, un microondas y una máquina eléctrica de depilar.

El robo se produjo en abril del año 2011, después de que el ladrón sentenciado hubiese dejado de vivir en la vivienda contigua. Al parecer, accedió al domicilio a través de la terraza, logrando abrir la puerta de cristal.

El magistrado del Juzgado de lo Penal número 2 de Castellón lo condenó por un delito de robo con fuerza en casa habitada y le impuso el pago de las costas del proceso. La defensa del procesado recurrió el fallo, alegando que no existía prueba de cargo para sentenciarlo, incidiendo en que la única relación entre el ciudadano marroquí y el asalto era que este se encontraba en las inmediaciones del apartamento.

NI HERRAMIENTAS NI ÚTILES // Asimismo, alegaron que al procesado no se le incautaron herramientas ni útiles para forzar ninguna puerta de acceso a la casa. Sin embargo, la Audiencia Provincial de Castellón, como máximo órgano judicial en la provincia, ha desestimado el recurso y ha confirmado la pena impuesta, tal y como se señala en la sentencia primigenia dictada por el máximo órgano judicial de la provincial de Castellón, por lo que el marroquí tendrá que cumplir una condena de dos años y medio de prisión.

La víctima del robo no pidió indemnización alguna durante el juicio que se celebró en la Ciudad de la Justicia castellonense, a pesar del importante botín que el ya condenado se llevó de su domicilio. Así, la sentencia no contempla una compensación monetaria para él, tal y como se asegura en el auto judicial de la sentencia dictada. H