Mi hija le dijo a su novio que quería acabar la relación y él la cogió por el cuello, la llevó a su casa y la maniató, insultándola y diciéndole que la iba a matar». Es el relato que ofreció ayer una vecina de Almassora durante el juicio que se celebró en la Audiencia Provincial contra quien fue pareja de su hija, C.P.D., para quien el fiscal reclama seis años por detención ilegal.

Los hechos objeto del caso se produjeron en el 2016, cuando la víctima se citó con el acusado en la UJI para comunicarle que quería poner fin a la relación.

Según el fiscal, él la agarró del cuello y la empujó hacia sí, haciendo caer la espalda de ella sobre sus piernas, donde le siguió apretando el cuello más fuerte. Al sentir que se ahogaba, ella lanzó una fuerte patada contra la puerta delantera derecha, rompiendo el cristal de la ventanilla.

Sorprendido, el procesado arrancó y a gran velocidad la trasladó al domicilio. Allí, cerró la puerta de entrada, tapó todas las ventanas y desconectó la alarma.

La condujo a su habitación, le ató de pies y manos con una cinta adhesiva y le apuntó con una escopeta. Llegó a girar el rostro de su pareja en varias ocasiones para obligarla a mirar el arma de fuego con la que le apuntaba.

La mujer comenzó a decir que iba a volver con él, que la soltara, que ella no diría nada. Dirigiéndose a su novia le dijo que iban a llegar sus padres, que la iba a soltar, pero que si decía algo y veía coger un móvil para llamar, los mataría a todos. Los padres fueron al dormitorio de su hijo, dejándola sola, lo que ella aprovechó para huir de la vivienda.

En ese momento, el acusado salió rápidamente en su búsqueda con un cuchillo. Según el fiscal, la madre del acusado sacó a la joven escondida en su coche para que el agresor no la viera.

Sin embargo, ayer la madre de él lo negó todo en el juicio. Sostuvo que fue la chica quien agredió a su hijo y contó una enrevesada historia de cómo ambas salieron de la casa, tachando a la víctima de «posesiva» y afirmando que tenían una relación «tóxica».

En una versión anterior, su hasta entonces consuegra declaró que el chico, al igual que sostiene el fiscal, reclamó a su pareja que no lo denunciara.