Espectacular persecución la que tuvo lugar el domingo por la tarde entre Orpesa y Torreblanca. Dos ocupantes de un coche se dieron a la fuga tras recibir el alto de la Guardia Civil, embistieron un vehículo patrulla, hirieron a dos agentes e iniciaron una peligrosa huida a toda velocidad.

Fue un conductor que circulaba por la nacional 340 quien dio aviso a la Benemérita de que un automóvil transitaba de forma temeraria por la zona de las cuestas de Orpesa. A la altura del peaje de la AP-7, una patrulla dio el alto al coche, pero el conductor aceleró y golpeó lateralmente a la Guardia Civil en varias ocasiones. Uno de los agentes sufrió lesiones cervicales y ha recibido la baja médica, mientras que su compañero también registró daños en un hombro, según confirmaron a este periódico fuentes conocedoras del citado caso.

DE ORPESA A TORRENOSTRA / Los agentes iniciaron en Orpesa la persecución de los fugitivos. Finalmente, pudieron interceptarlos en la carretera que va de Torreblanca a la playa de Torrenostra, según pudo saber Mediterráneo. Durante su huida el vehículo fugado circuló por el casco urbano de Torreblanca de forma temeraria, causando un grave peligro para viandantes y para el resto de conductores. Esta actitud no pasó desapercibida entre los testigos de la persecución policial.

Tras veinte kilómetros, dos agentes del puesto de Benicàssim lograron frenar a los delincuentes y esposarlos. El automóvil reventó varias ruedas, perdió una de ellas y acabó en el carril bici con importantes desperfectos. Al identificar al conductor, un vecino de Castelló, de nacionalidad española y de 38 años, los guardias civiles comprobaron que tenía numerosos antecedentes por tráfico de drogas y por robos en domicilios. Asimismo, la mujer que lo acompañaba, española de 48 años, portaba éxtasis y dinero en efectivo que le fueron confiscados.

La Benemérita los trasladó hasta los calabozos del cuartel de Benicàssim, acusados posteriormente de presuntos delitos contra la seguridad vial, atentado, daños y tráfico de drogas. Agentes de la Policía Local de Torreblanca y una patrulla del cuartel de Alcalà de Xivert se personaron también, pero su intervención no fue necesaria al encontrarse ya los dos delincuentes engrilletados.