Una patrulla de la Policía Local de Benicarló tuvo que desplazarse el pasado domingo por la noche a una vivienda de la calle de Sant Joan tras recibir el aviso de que un hombre había accedido al domicilio sobre el que tenía orden de alejamiento. Se trataba de un varón 22 años que tenía prohibida la aproximación a la casa de su padre. Los agentes acudieron al lugar y se entrevistaron con la persona que los llamó por teléfono pidiendo el auxilio.

Los policías locales revisaron el interior del inmueble y también la vivienda anexa, no logrando localizar a la persona que había accedido a la casa. Sí observaron daños en los cristales de una ventana del inmueble, trasladándose también a la vivienda una patrulla de la Guardia Civil de Benicarló. Informaron a la víctima, que estaba ilesa, de su derecho a denunciar los hechos.