No era la primera vez que se cometían irregularidades en su agencia de viajes. Francisco José Gil, el responsable de la empresa Aimme Travel Tours de Vila-real, ya fue detenido a principios de año, acusado de apropiarse de 40.000 euros durante la contratación de unos viajes. Así ha podido saberlo Mediterráneo de fuentes del caso, que investigan una posible estafa a, al menos, cuatro parejas de Vila-real, que se han quedado sin el dinero invertido y, por supuesto, sin viaje.

Y es que, tal y como adelantó ayer en exclusiva este diario, el responsable del negocio, ubicado en el número 47 de la avenida Francisco Tárrega, cerró el local sin dar ninguna explicación y dejó, entre otros afectados, a dos parejas de la localidad sin la luna de miel que creían haber contratado. Por el momento se sospecha que pueda haberse apropiado de un botín de más de 12.000 euros.

El pasado mes de enero Francisco José Gil, natural de la Vall d’Uixó y de 48 años, fue arrestado y acusado de un delito de apropiación indebida. Según ha podido saber este periódico de fuentes policiales, el susodicho utilizó diversas tarjetas de crédito que habían sido robadas por terceros para contratar varios viajes. Posteriormente, los canceló e hizo que le ingresaran en su cuenta el dinero que había abonado, quedándose, presuntamente, con unos 40.000 euros que pertenecían a distintas entidades bancarias.

La noticia de estos antecedentes fue recibida con indignación por los vecinos y afectados, quienes apuntaron, en declaraciones a este diario, que “es una vergüenza que lo detengan una vez y vuelva a jugársela a la gente”. “No entendemos cómo después de quedarse todo ese dinero, ha seguido trabajando en la agencia, pudiendo estafar a más gente, como se ha descubierto ahora”.

“ES UN FANFARRÓN” // En el bar al que Francisco José Gil acudía a diario, muy próximo a su agencia de viajes, lo definen como una persona “fantasma” y apuntan que “siempre estaba vacilando”. Uno de sus trabajadores reveló ayer a este diario que el acusado de estafar a varios de sus clientes pidió dinero al propietario del bar, quien le negó el préstamo porque no se fiaba de él.

Los damnificados por la supuesta estafa y huida del agente de viajes a Perú, donde se encuentran su mujer y su hija pequeña, todavía no dan crédito a lo que les ha ocurrido. Dos de las parejas que han denunciado ante la Policía Nacional haber sido víctimas de un engaño se casan en los próximos días (una de ellas este mismo sábado) y reconocen que este hecho ha empañado uno de los días más felices de sus vidas. “En lugar de estar ultimando preparativos, ilusionados y felices, estamos en comisaría y pidiendo documentos al banco para ver si podemos recuperar los más de 7.000 euros que nos ha robado”, apuntaba, frustrada, una víctima. H