El exseleccionador nacional de atletismo Miguel Ángel Millán, condenado a 15 años por abusos sexuales a menores que eran discípulos suyos, también llevó a cabo prácticas pedófilas en Castelló. Lo hizo en el año 2012, según ha declarado probado la justicia, aprovechando que en la provincia --con gran tradición de atletismo base-- se celebraban competiciones de pruebas combinadas, la especialidad de sus pupilos.

Entre los meses de enero y julio de ese año, el preparador deportivo viajó con uno de sus atletas, que tenía 15 años, hasta la provincia, donde pernoctó. Se alojó en la misma habitación que el niño y con la excusa de hacerle masajes terapéuticos, manoseó al menor. Según establece la sentencia de la Audiencia Provincial de Tenerife a la que ha tenido acceso Mediterráneo, Millán primero tocó a la víctima en zonas que nada tenían que ver con prácticas sexuales, pero posteriormente comenzó a masturbar al adolescente, «sin atreverse este a rechazarlo debido a la fuerte ascendencia deportiva y personal que el exseleccionador nacional de atletismo tenía sobre él».

Los tocamientos, caricias y en ocasiones prácticas orales se sucedieron en los meses de referencia, no siendo capaz el menor de negarse a los requerimientos sexuales del adulto por las recurrentes reacciones de este de decepción y malestar en el ámbito deportivo cuando el menor se atrevía a contrariarle.

No fue hasta el año 2017, ya era mayor de edad, cuando la víctima decidió presentar una denuncia, revelando los abusos sufridos, con el objetivo de que Millán no hiciera lo mismo a otros niños. Los hechos descritos le ocasionaron al adolescente un transtorno emocional, compatible con situaciones de maltrato, sentimiento de culpa, miedo y ansiedad, según la sentencia.

La Audiencia Provincial de Tenerife --lugar donde ejercía su actividad el procesado y donde se produjeron muchos de los abusos denunciados-- condenó recientemente al exseleccionador nacional por delitos de abusos sexuales continuados a la pena de 15 años de prisión y a una indemnización de 35.000 euros.

En Castellón, el caso de otro preparador físico se encuentra en estos momentos pendiente de señalamiento para su juicio. Se trata del entrenador de gimnasia de Betxí Carlos F.C., quien se enfrentará a 28 años de cárcel por realizar presuntos masajes sexuales a cinco niñas de entre 6 y 14 años a las que entrenaba, como adelantó este periódico días atrás.