Un hombre de 84 años falleció en el hospital de Orihuela (Alicante) diez días después de ser ingresado en estado crítico con dos graves lesiones en la cabeza que le causó su esposa, de 83 años, con un plato de cerámica en la casa conyugal, situado en la pedanía oriolana de Desamparados.

Un hijo del fallecido fue quien denunció el caso ante la policía al sospechar que su padre había sido agredido por su madre, pese a que ella atribuyó las lesiones a un accidente doméstico. La mujer fue detenida el mismo día de la agresión, el pasado 7 de septiembre, y tras pasar a disposición judicial se acordó su ingreso en prisión, inicialmente por tentativa de homicidio, acusación que se modificará en el juzgado tras la muerte del octogenario

«ESTÁ DURMIENDO» // Fría, despreocupada, nada afligida y sin interesarse por el estado de salud de su marido. Así se mostró la mujer de 83 años cuando sus hijos acudieron al domicilio de sus padres e. «Estará durmiendo», llegó a decirle la mujer a una hija que acudió a primera hora de la mañana ese de septiembre y vio a su padre tendido en el suelo del garaje de la vivienda con un charco de sangre a su alrededor. La esposa llamó a las seis de la madrugada a su hija para alertarla de lo ocurrido. Le explicó que sobre las tres de la madrugada escuchó un ruido pero no le dio importancia y posteriormente encontró a su marido en el suelo del garaje.

Sufría dos lesiones graves en la cabeza y fue evacuado en ambulancia al hospital. Por su parte, un hijo del octogenario acudió a la comisaría de Orihuela y comunicó a los agentes que sospechaba que su propia madre podría haberle causado las heridas y contó que la tarde anterior habían mantenido una discusión por motivos domésticos y que desde hacía más de seis años tenían conflictos de pareja.

SANGRE EN LAS PAREDES // Agentes de Seguridad Ciudadana, Policía Judicial y Policía Científica acudieron al domicilio y en la inspección hallaron restos de sangre en las paredes pese a que la detenida había limpiado minuciosamente el lugar. Asimismo, en un cubo de la basura descubrieron trozos de un plato cerámico y en el canto de uno de ellos detectaron restos biológicos que presuntamente pertenecen a la víctima.