El Juzgado de Instrucción número 4 de Vinaròs mantiene abiertas diligencias previas por la muerte el pasado febrero de un ciudadano marroquí tras caer desde la muralla de Peñíscola. La familia del finado se ha personado en la causa como acusación. Según indicaron en su día fuentes municipales, esta persona fue interceptada por la Policía Local como sospechosa de varios robos. Impactó contra la escollera del puerto y falleció.

Dos agentes de la Policía Local están investigados por un presunto delito de homicidio por imprudencia, según ha indicado el TSJCV. La investigación se centra en determinar si el fallecido recibió algún disparo con una arma eléctrica paralizante. El Ayuntamiento de Peñíscola sería responsable civil subsidiario en caso de condena de los agentes municipales. El juzgado decidirá sobre el archivo de la causa o si, por el contrario, continúa adelante el proceso penal.