El refranero español dice que se pilla antes a un mentiroso que a un cojo. Así ha sido en esta ocasión para la Guardia Civil, que ha detenido a un vecino de Onda, de 35 años, por fingir que había sufrido un asalto en su domicilio. El hombre denunció en el cuartel de Onda haber sido víctima de un importante robo en su casa, en el que había perdido, según relató a los agentes de la Benemérita, objetos por un valor superior a los 11.000 euros, tras introducirse en el domicilio de Onda forzando la puerta de entrada al mismo.

De inmediato, los efectivos se pusieron a investigar el caso para dar con los supuestos autores del grave robo en la vivienda.

Sin embargo, lo que descubrieron fue algo muy diferente a lo que la víctima había denunciado. Con las pesquisas, se dieron cuenta de que parte de los objetos presuntamente sustraídos habían sido vendidos, previamente, por el propio denunciante, antes de dirigirse al cuartel.

Asimismo, los investigadores descubrieron que otros de los enseres personales, que dijo se habían llevado los asaltantes, continuaban en su poder.

Por todo ello, los agentes se dieron cuenta de que el hombre, supuestamente, había mentido para, presuntamente, cobrar el dinero del seguro. Así, los guardias civiles de Onda, procedieron a su detención por incurrir en una simulación de delito, castigada en el artículo 457 del código penal con multas de seis a 12 meses, según informaron ayer desde la comandancia de Castellón a través de un comunicado oficial.

El detenido, que denunció un hecho inexistente, en unión a las diligencias instruidas por el instituto armado, fue remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Nules. H