El fraude a través de internet cada vez es un delito más extendido en la provincia de Castellón. Hasta el punto que en el 2016, de cuando constan los últimos datos del Ministerio del Interior, en las comarcas castellonenses se denunciaron 587 infracciones por fraudes informáticos.

Este tipo de delitos fueron la mayoría de los incidentes que los castellonenses denunciaron en el 2016, seguidos por 129 amenazas y coacciones; 47 hechos de falsificación informática; 41 delitos sexuales; 32 hechos contra el honor; 20 hechos de acceso e interceptación ilícita; 11 de interferencias en los datos del sistema y 3 contra la propiedad industrial/intelectual, según las cifras que ayer aportó la Delegación del Gobierno en la Comunitat.

Estas 870 infracciones telemáticas suponen un aumento del 11% respecto al ejercicio anterior, y, a falta de los datos de este año, que se conocerán hacia el verano, este es un problema «que va a ir a más, tenemos que estar muy formados», como destacó ayer el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, que clausuró en Castellón una jornada para formar respecto a este tipo de delitos.

Aunque en el mundo de internet este tipo de delitos se pueden producir desde cualquier punto del planeta, Moragues informó de que por aquellas 870 infracciones «se detuvo o investigó a 99 personas en la provincia».

NUEVA APP

Además de la jornada de formación en ciberseguridad, la primera que se celebra en Castellón, para tratar de poner freno a esta tipología de delitos, el delegado del Gobierno apuntó que se está ultimando la puesta en marcha de una nueva aplicación móvil, AlertPIC, «que asegura una comunicación rápida, fiable, segura y fluida en el caso en que se produzcan incidentes entre los operadores de infraestructuras críticas». «Gracias a esta aplicación, la primera de su clase a nivel internacional, podrá intercambiarse información y ficheros en tiempo real como canal de comunicación alternativo ante situaciones de crisis, permitiendo realizar llamadas directas para comunicar alertas», explicó.