La escuela infantil Mar de Somnis del Grao de Castellón, ubicada en la calle Palmeral, sufrió en la madrugada del domingo al lunes el quinto asalto desde el mes de agosto. Un grupo de vándalos accedió a la guardería municipal saltando la valla, rompiendo la entrada de un almacén y lanzando la pintura que había guardada contra puertas y cristaleras.

En esta ocasión, el hecho es un puro acto vandálico, pero en otras recientes los asaltantes se han apoderado, como durante las vacaciones de Navidad, de numeroso material de oficina --llegando a hurtar incluso celo--, juguetes de los niños, triciclos, USB y cámaras de fotos con imágenes de exalumnos, entre otros objetos.

También han sustraído extintores --el mismo día en que robaron un desfibrilador del campo de fútbol Javier Marquina-- y se han dedicado a abrir los grifos de lavabos y duchas, provocando inundaciones en la escuela infantil; así como a bañar las puertas con aguarras, un acto que además podría ser peligroso para los niños.

Personal del centro y padres están «hartos» de los continuos hechos delictivos, que han sido denunciados en comisaría y que ya investiga la Policía Nacional. «Pasan cosas casi cada fin de semana y ya no sabemos qué hacer», explican a este periódico.

Estos hechos se suman a los dos ataques a las instalaciones del C.F. San Pedro --con menos de 15 días de diferencia--, con pintadas y destrozos en mobiliario y equipaciones. Los agentes no descartan que los autores de los ataques a la guardería sean los mismos que los que accedieron a la sede deportiva y es que, en ambos casos, hacen daño indiscriminado.

Los cacos también han actuado este mes contra la clínica veterinaria Sant Pere, en la calle Almirante Cervera, como informó este diario. En ese local fracturaron las dos persianas de seguridad y revolvieron el interior, apoderándose de unos 400 euros.