La Guardia Civil halló muerta ayer a una mujer con heridas de arma blanca en el municipio cántabro de Escalante al ir a notificarle el fallecimiento de su marido en un accidente de trafico, del que se sospecha que es autor del apuñalamiento en un posible caso de violencia machista.

La fémina, de 52 años, no había presentado denuncias previas por malos tratos, según informó la Delegación del Gobierno en Cantabria. Su presunto asesino, tres años mayor que ella, falleció en un accidente de tráfico tras colisionar con su vehículo contra un árbol. Al ir a notificarle su fallecimiento y acceder al domicilio del matrimonio, los agentes encontraron el cuerpo de la mujer, que presentaba varias heridas de arma blanca y se hallaba junto a un charco de sangre.

El cuerpo del marido también presentaba heridas de arma blanca. La pareja tenía su domicilio fijado en Zaragoza, aunque actualmente residían en Escalante. De confirmarse los hechos (no existen denuncias de malos tratos), sería la segunda víctima machista este año en Cantabria.