El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Castelló ha enviado a prisión provisional a un vecino de la capital, de nacionalidad española y 60 años, por herir a su exsuegra en la oreja con un cuchillo y prender fuego a su casa de la calle Río Palancia.

Todo apunta a un nuevo caso de violencia machista y es que el hombre, que responde a las iniciales F.J.M., se desplazó el pasado lunes día 30 al inmueble, supuestamente, en busca de su exnovia y se inició entre ambos una discusión. En ese momento, la madre de la chica, sin embargo, se metió entre los dos, temiendo por su hija y acabó agredida por el varón con el arma.

Fueron los vecinos quienes avisaron a la Policía Local de Castelló al ver a una mujer gritar en la calle y pedir auxilio. La misma aseguraba que un hombre había entrado en su casa y había atacado a su madre. Los agentes municipales se adentraron en la vivienda y comprobaron que el agresor había prendido fuego a dos habitaciones de la casa. Los efectivos comenzaron a gritarle para que saliera del domicilio, pero este hizo caso omiso, por lo que los policías abandonaron el piso ante la gran humareda generada.

En vista del fuego, los agentes se pusieron en contacto con los bomberos municipales y, al poco rato, el detenido acabó por salir de la vivienda. El hombre, que había permanecido escondido en el interior y había tragado humo, presentaba síntomas de intoxicación, por lo que los efectivos desplegados avisaron a una ambulancia para que lo atendiera.

Los sanitarios lo evaluaron y lo trasladaron hasta el hospital, donde quedó ingresado bajo custodia de la Policía Nacional. Tras recibir el alta médica, pasó a disposición judicial este jueves y la autoridad competente lo envió a prisión provisional. La mujer herida se recupera de la lesión sufrida con el arma blanca.

EL CASO DE L’ALCORA

Este caso se registró, precisamente, el mismo día en el que otro hombre atacó, también con un cuchillo, a su exmujer en l’Alcora. Al igual que en el suceso de Castelló, el agresor acudió a la vivienda de la mujer para sorprenderla. Sin embargo, el caso de la capital de l’Alcalatén acabó de una manera más trágica. El maltratador logró herir en el cuello a su expareja, provocándole un corte de 20 centímetros que la mandó al Hospital General. Por suerte, logró salvar la vida y pudo pedir auxilio a un vecino que la encontró frente al ascensor tras el ataque machista sucedido en el garaje.

Tras el intento de homicidio, el hombre corrió a casa de su anciana madre --a 40 metros de distancia del inmueble donde atacó a la madre de sus hijos--, donde se quitó la vida de un tiro.