Enésimo caso de violencia machista el producido ayer en Almería. Un hombre mató a su mujer en la pedanía de Burjulú de Cuevas del Almanzora y, después de avisar a través de WhatsApp a una amiga de la atrocidad que había cometido, se suicidó.
El homicida, de origen boliviano, acabó ahorcándose y, por el momento, todavía no ha trascendido cómo asesinó a su compañera sentimental, natural de Paraguay, aunque la Guardia Civil señaló que no presenta señales visibles de violencia, por lo que será la autopsia la que determine las causas de la muerte, según revelaron fuentes policiales y de la Subdelegación del Gobierno.
LLAMADA DE LA AMIGA
A las 09.20 horas, una amiga del hombre alertó, notablemente asustada, de que había recibido por Whatsapp un mensaje en el que le decía que iba a quitarse la vida después de haber matado a su esposa.
El crimen se produjo en la vivienda donde su mujer cuidaba a una anciana impedida. La pareja, ambos de 38 años, tenía una niña de 8 años que no se encontraba en el domicilio porque estaba en otro municipio con unos familiares del padre.
Horas más tarde se supo que la mujer había roto la relación con su pareja, quien habría intentado retomarla, aunque no se habían interpuesto denuncias por malos tratos antes del crimen.
Tras lo sucedido, el Ayuntamiento de Cuevas del Almanzora declarará hoy dos días de luto oficial por la muerte de esta vecina y el alcalde de la localidad, Antonio Fernández, convocó una concentración silenciosa que tendrá lugar al mediodía.
CONDENA ENÉRGICA
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, expresó su dolor y su condena «más absoluta» ante el «crimen machista» que se ha producido en esa pedanía almeriense y, a través de su cuenta de Twitter, escribió que «toda la sociedad debe luchar contra esta lacra que asesina a las mujeres».
