Agentes municipales investigan también a otro conductor que intentó dar esquinazo a los efectivos cuando conducía bajo la influencia del alcohol y con su hijo de cuatro años en el vehículo. El hombre, según han explicado fuentes policiales a Mediterráneo, circulaba de forma sospechosa por la Cuadra Borriolench y un coche policial de paisano lo detectó y puso las sirenas.

Lejos de detenerse, huyó del agente, saltándose semáforos e intentando huir por el Raval Universitari. Al parecer, incluso golpeó a otro vehículo y estuvo a punto de atropellar a diversos peatones.

Finalmente, fue interceptado cuando se disponía a entrar en el párking de su domicilio. En la prueba de alcoholemia dio un resultado de 0,61 mg/l y, por todo ello, se le imputa un delito contra la seguridad vial al conducir ebrio y por hacerlo, supuestamente, de forma temeraria.