La magistrada del Juzgado de Instrucción número 5 de Castellón ha citado a declarar como investigados (término que sustituye al de imputados) a los tres médicos de Castellón que fueron denunciados por los padres de una menor de Benicàssim que quedó impedida tras sufrir una crisis neurológica.

Los progenitores de la adolescente acusan a los facultativos de una presunta negligencia por suministrar a la joven el fármaco que le causó un grave fallo.

La jueza ha fijado en el 13 y 15 de julio las declaraciones de los tres investigados que atendieron a la adolescente y le administraron un antibiótico al que la joven había presentado intolerancia con anterioridad, a pesar de los antecedentes existentes.

Según concluye el informe médico forense elaborado al respecto, al que ha tenido acceso Mediterráneo, los tres médicos deberán exponer los motivos por los que emplearon esta terapia con la chica “o si, por el contrario, la utilizaron ignorando deliberadamente su historial”.

Mari Carmen Fernández llevó a su hija al centro de salud de Benicàssim por unos aparentes ataques de epilepsia en octubre del 2014. Allí, la remitieron al Hospital General de Castellón, indicando que existían informes de la paciente en el Hospital Provincial que debían ser revisados, según la denuncia que publicó este periódico en exclusiva.

CRONOLOGÍA DE LA CRISIS // Los síntomas de la menor fueron descritos como una crisis de ausencia por la doctora del General que la atendió (primera denunciada), quien recetó a la menor ácido valproico (Depakine).

La joven fue derivada, posteriormente, al centro de salud mental del Grao, donde otra facultativa (segunda demandada) le mantuvo dicho tratamiento.

Diez días después, la joven y su madre se personaron en Urgencias, pues la menor había empeorado desde que comenzó a ingerir el antibiótico prescrito. El médico que la atendió (tercer denunciado) le prolongó la medicación.

Según el informe forense, la paciente sufrió una “crisis neurológica que se atribuye al Depakine”, consistente en “pérdida de movilidad y necesidad de permanecer ingresada en un centro”.

En la actualidad, la joven, en cuyos antecedentes clínicos figuraba diagnosticada una epilepsia generalizada idiopática, se encuentra interna en la UHB del Hospital Provincial de Castellón, tras sufrir una reagudización de su patología mental.

Según consta en el informe del Instituto de Medicina Legal de Castellón elaborado al respecto, resulta “muy evidente” la existencia de antecedentes de intolerancia al fármaco, “por lo que ignorar simplemente este dato constituiría un verdadero error”.

“No se revisó el historial de la menor antes de recetar el fármaco, aún cuando el médico de Benicàssim lo indicó; y viendo que el tratamiento era contraproducente, se le prolongó. Hay una serie de negligencias que deben ser investigadas”, asevera el letrado de la acusación particular.

Por su parte, la madre de la menor incide en que esta “tiene un grave daño cerebral, se pega a sí misma, está impedida” y pide depurar responsabilidades. H