La Guardia Civil de Alicante se ha incautó de 226 kilos de cocaína que se encontraban ocultos en un contenedor cargado de almendras que llegó a una empresa de Altea, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.

Al abrir el contenedor, los operarios de la compañía observaron varios bultos sospechosos que sobresalían sobre la carga de almendra, por lo que avisaron inmediatamente a la Guardia Civil.

Al iniciar la bajada de la mercancía, los agentes visualizaron ocho mochilas militares en el interior del camión, las cuales transportaban más de 200 tabletas cuadradas de una sustancia sospechosa con un peso total de 226 kilos.

Tras analizar con reactivos dicha sustancia, se pudo concluir que se trataba de cocaína de gran pureza, revelaron las mismas fuentes. El contenedor, procedente de Oakland (California), había sido embarcado para que las almendras que contenía fueran tratadas en España, pero el precinto de origen del embalaje había sido cambiado por otro con distinta numeración durante alguna escala, donde alguien debió introducir la droga.