Agentes de la Patrulla de Protección del Medio Ambiente y Bienestar Animal de la Policía Local de Castellón (UPROMA) han instruido diligencias al juzgado de instrucción de guardia de la capital de la Plana contra tres varones, de 35, 26 y 27 años, por ser los dueños de dos gallos que aparecieron malheridos y ensangrentados dentro de un vehículo.
Los ejemplares fueron localizados por policías que realizaban un control rutinario de documentación del Grupo Operativo de Tráfico. Los agentes vieron cómo dos menores sostenían a los gallos, que tenían graves heridas.
Los efectivos inmovilizaron el vehículo e iniciaron una investigación para determinar quiénes eran los dueños de los gallos, ya que, en ese momento, iban a cargo de dos menores de edad.
Tras meses de averiguaciones, la policía ha hallado a los propietarios de los animales, quienes, presuntamente, utilizaban a los gallos para celebrar peleas ilegales. Los agentes han pedido su inhabilitación para tener animales debido a sus antecedentes. H
