La mujer acusada de rociar a su marido en diciembre del 2012 con aceite hirviendo y provocarle quemaduras en la cara y en las manos se sentará definitivamente en el banquillo de la Audiencia de Castellón el próximo 5 de abril, ya que el juicio que estaba previsto para el 24 de enero quedó suspendido porque la acusada indicó que no estaba en condiciones de declarar. Un extremo que fue contrastado por un médico forense que la examinó poco antes de celebrarse la vista oral.

Se da la circunstancia de que la mujer sufre una minusvalía del 80% y fue declarada como incapaz el pasado mes de diciembre.

El tribunal de la Audiencia Provincial suspendió el juicio a la espera de que esta aportara más informes médicos sobre su salud mental. La fiscal pide que sea ingresada en un psiquiátrico durante 10 años y la defensa que siga un tratamiento.