La Sección Primera de la Audiencia Provincial dio lectura ayer de las declaraciones de las dos doctoras tituladas de la clínica Estetic Medical Center de Vinaròs --una rusa y otra brasileña-- que se encuentran en paradero desconocido. En ellas, las facultativas acusan a José Manuel Pérez --Coté-- y Frederic Gisbert de actuar como médicos sin serlo y de cometer irregularidades en la clínica del Baix Maestrat. «No limpiaban ni esterilizaban el material y presencié varias operaciones que hacían en una silla de dentista. Guardaban restos de sangre en neveras durante días», relató una de ellas.

La misma mujer afirmó en su día que los falsos facultativos «necesitaban un médico titulado para que no les cerraran la clínica», por lo que contactaron con ella. «Coté era muy prepotente. Me enseñó cómo hacía implantes capilares y una liposucción. Al verlo con Gisbert en el quirófano pensé que no tenían conocimientos de cirugía», explicó la testigo.

DENUNCIA AL HOSPITAL

Por su parte, la otra médico, acusada en esta causa y en búsqueda y captura, reconoció en su interrogatorio grabado que había trabajado en Estetic Medical Center durante dos años y medio. «Denuncié a Gisbert ante el Hospital Comarcal de Vinaròs por ejercer como médico sin serlo», dijo la doctora rusa en su declaración, asegurando saber que ella era la única profesional de la citada clínica.

Asimismo, afirmaron que las operaciones en Estetic Medical Center se realizaban a horas intempestivas, «a partir de las siete de la tarde y hasta la madrugada». En el caso de la doctora brasileña, que iba a ser contratada para sustituir a la rusa, aseguró al juez instructor que Gisbert se presentó como «doctor» y su mujer como «enfermera».

El juicio concluirá hoy con la declaración de peritos y la lectura de los informes definitivos.