Mi padre, desesperado, intentó apagar las llamas con una garrafita de agua al ver que la casa se quemaba, pero lo hemos perdido todo... El fuego nos ha quitado los recuerdos de tres generaciones». Así relató ayer Laura Garcés a Mediterráneo el drama que su familia está viviendo tras arrasar el incendio forestal de Culla la vivienda de sus padres.

Amadeo Garcés, que se encontraba en la casa cuando el fuego comenzó a aproximarse, solo pudo coger las llaves de un tractor y un todoterreno y sacarlos de la cochera, tal y como lamenta su hija, repleta de tristeza. «Se quedó con lo puesto. No tiene más ropa que la que llevaba. Todo se ha quemado: vehículos, muebles, electrodomésticos... incluida, una cama antiquísima que teníamos, de 1800», relató Laura, quien considera que la quema de su casa «se podría haber evitado».

Y es que, según aseveró la joven, los bomberos se quedaron sin agua justo en el momento que el fuego amenazaba su domicilio y tardaron «dos horas en volver». «Para cuando regresaron, ya era tarde. Nos dijeron que no había nada que hacer», aseguró la afectada.

Desde el Consorcio Provincial de Bomberos incidieron en que una de las unidades que se dirigía a esa masía era la que quedó atrapada por las llamas --resultando heridos cuatro de los efectivos--. Y es que las rachas de viento de casi 100 km/h dificultaron seriamente la extinción. El incendio, que está estabilizado y ha calcinado más de 450 hectáreas, avanzó sin control durante horas, impidiendo la meteorología el vuelo de los medios aéreos. Un total de nueve helicópteros y aviones (incluido un hidroavión de la base de Torrejón, cedido por el Ministerio) sí pudieron sobrevolar la zona ayer, cuando la climatología dio un respiro a Culla y lograron estabilizar las llamas.

Hasta el puesto de mando avanzado se trasladó el president de la Generalitat, Ximo Puig, quien pidió «prudencia» ante una situación que calificó de «extrema gravedad». «El hombre está tras el 80% de los fuegos y tenemos que adoptar las máximas medidas posibles para que esto no ocurra», subrayó Puig, quien destacó que «el viento ha sido el motor de este incendio». También estuvieron en la zona afectada el director de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, José María Ángel, y el diputado provincial de Bomberos, Luis Rubio.

Los medios permanecieron anoche en la zona para refrescar y también lo harán hoy, debido a la peligrosa previsión de fuertes vientos --de hasta 80 km/h-- en el interior norte provincial, que podrían reavivar las llamas.

ACCIDENTE AÉREO

Sobre las 17.00 horas, una colisión entre un helicóptero que había actuado en el incendio de Culla y un ultraligero --estando ambos ya en la zona del aeródromo de Mutxamel (Alicante)-- dejó herido grave al piloto de la avioneta, que fue trasladado al Hospital General de Alicante. Según informó la Generalitat, el ultraligero alcanzó --a unos 10 metros de altura-- el rotor de cola del helicóptero y la pericia del piloto del medio de extinción del fuego permitió el aterrizaje sin que la tripulación sufriera daños personales.

suera, controlado / Por otra parte, el incendio que se declaró en Suera el viernes, justo al lado del parque de la Serra Espadà, quedó extinguido ayer tras quemar 2,5 hectáreas de monte.