Las tradicionales sueltas de toros en el Domingo de Resurrección en la provincia de Cádiz acabaron en tragedia en Arcos de la Frontera, donde el domingo falleció un hombre tras haber sido corneado por un astado. Según han confirmado fuentes del Ayuntamiento de Arcos, el hombre, de unos 45 años y vecino de esta localidad gaditana, murió en el Hospital de Jerez, donde había sido trasladado tras haber sido embestido por el primero de los toros exhibidos.

El toro de Núñez del Cuvillo, de nombre Trampero y de 510 kilos de peso, sorprendió al hombre y le corneó dos veces, una en el pulmón y otra en la pierna. Tras ser atendido en el hospital de campaña instalado para la ocasión en Arcos y ante la gravedad de las heridas fue trasladado de urgencia al Hospital de Jerez.

Según las mismas fuentes, el hombre, además de sufrir la perforación del pulmón, tenía otro órgano dañado tras la cornada, lo que le causó un derrame generalizado, del que no se pudo recuperar.

El mismo toro también dejó herido grave a otro hombre, al que corneó en el vientre, por lo que fue trasladado al hospital de Villamartín, donde ya está fuera de peligro.