Un aficionado al parapente, natural de Benicàssim, Vicente Ferrer Alberich (43 años), falleció en la tarde de ayer mientras participaba en el Campeonato de Parapente "Zarza Capilla Vuela", que durante todo el fin de semana se ha celebrado en esta localidad de la provincia de Badajoz.

Fuentes de la organización confirmaron a Mediterráneo que Ferrer sufrió una «caída fortuita» poco después de las 15.00 horas mientras realizaba uno de los ejercicios. Una hipótesis que confirmó el Centro de Emergencias 112 de Extremadura en un comunicado. Hasta el lugar del suceso se trasladaron efectivos de la Guardia Civil y de la Unidad Medicalizada de Emergencias (UME) de Cabeza del Buey, que no pudieron hacer nada por su vida.

Según pudo saber este diario, el piloto benicense se encontraba junto a su familia en esta zona y era el único representante castellonense. Por ello, la organización habló de «tarde terriblemente dura» y emitió un breve comunicado en su página web en el que lamentaba los hechos y expresaba «el más sentido pésame a la familia y a toda la comunidad parapentista».

PRUEBA DE NIVEL

La del 2017 era la octava edición de "Zarza Capilla Vuela", un evento que reunía a los máximos exponentes del parapente español, acompañados por representantes de Portugal, México, Brasil, Rumanía y Argentina, entre otros países. La prueba deportiva contemplaba tanto sesiones instructivas (briefing) como despegues y vuelo libre.

Durante el fin de semana algunos deportistas buscaban batir el récord nacional de distancia en el aire, fijado en 260 kilómetros. Muchos pilotos participantes en la prueba ambicionaban alcanzar los 300 kilómetros al mando de sus parapentes, aunque finalmente los resultados deportivos quedaron en un segundo plano.

El comienzo de este tipo de prueba tuvo sus inicios en el año 2003, cuando varios aficionados descubrieron un lugar de despegue en el municipio, hecho que atrajo a todavía más pilotos extremeños, gracias a lo cual, se pudo acondicionar la zona debido al potencial que tenía para hacerla más segura hasta convertirse en un lugar en el que ya se disputan pruebas y campeonatos.