Un exconcejal de Torrechiva, electricista de profesión y vecino de Vila-real, Julián Martínez, murió ayer, tras permanecer una semana en coma en la UCI, ya que sufrió un desgraciado accidente al caerse de una escalera de mano mientras arreglaba el toldo de la puerta de su garaje. El exedil se resbaló tras perder el equilibrio y se golpeó la cabeza contra el suelo, como confirmó el alcalde de Torrechiva, Esteban Salas, quien lamentó su muerte. El entierro es hoy en la iglesia Mayor de Vila-real.