Un niño de once meses que se encontraba en una familia de acogida en Gipuzkoa se halla en paradero desconocido después de que se lo haya llevado su madre biológica durante una visita programada.

El suceso se ha producido antes de que la madre, de nacionalidad rumana, accediera al centro de San Sebastián en el que se iba a producir el encuentro. La diputada foral de Políticas Sociales, Maite Peña, informó ayer a los periodistas de que hacia las once de la mañana, cuando técnicos de la Diputación iban a entrar con el bebé en el centro donde iba a tener lugar la visita «supervisada», la madre ha «usurpado» al bebé «en plena calle».

Peña precisó que en ese instante, cuando había gran afluencia de tráfico, la mujer ha aprovechado para «abordar» a los técnicos y, en «un momento de desconcierto», en la que los «pilló de manera sorpresiva», cogió al niño de la sillita en la que lo llevaban.

A continuación, la madre subió con su hijo a un coche, conducido por un hombre, y cruzó con él la frontera hacia Francia, un dato que se ha confirmado porque el vehículo, ya identificado, se ha saltado un control policial en la localidad de Dax.