Condenado el dueño de un bar de Castellón al abono de una multa de 480 euros por un delito leve de defraudación de las telecomunicaciones, tras pillarlo la Policía Local con el Canal + pirata en su establecimiento. Según ha podido saber Mediterráneo de fuentes judiciales, los agentes entraron en el local y, tras requerirle la documentación del negocio, observaron que el ya sentenciado tenía un decodificador al lado de la televisión del establecimiento. Fue entonces cuando los policías comprobaron, al poner el HDMI de la televisión, que se veían en abierto los canales de pago, procediendo entonces a requisar el aparato e instruir un atestado policial por un supuesto delito contra la defraudación de las telecomunicaciones.

El condenado deberá indemnizar asimismo a Canal + como perjudicado de los hechos.