La Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a tres personas por mentir cuando fueron citadas en calidad de testigos a un juicio celebrado en el año 2013 en la capital de la Plana. Los sentenciados --novia y dos amigos de un procesado por un delito de lesiones-- dijeron al tribunal que el acusado se había hecho unas heridas en la mano al caerse al suelo y cortarse con unos cristales. Sin embargo, según ha determinado la justicia, eran conocedores de que esas lesiones se las había hecho al darle un brutal puñetazo a otra persona en el transcurso de una pelea en una discoteca.

El impacto del puño con los dientes del denunciante le había provocado unos cortes por los que tuvo que ser atendido en un centro médico, según consta en el documento judicial.

El tribunal los ha procesado por estos hechos --los testigos tienen obligación de decir la verdad en sus declaraciones según el Código Penal español, a diferencia de los acusados, que sí pueden mentir-- y les ha impuesto una multa de 620 euros a cada uno, además de una pena de ocho meses de prisión. También deberán correr con las costas del proceso judicial, tras desestimar la Audiencia el recurso que habían interpuesto contra la sentencia de un juzgado de lo Penal.

«No se trata de una credibilidad mayor o menor del testigo, sino de que falte sustancialmente a la verdad en aquello que se le pregunta», indican los jueces.